lunes, 7 de septiembre de 2009

Los Hippies


Se llama Hippie o Jipi1 a un movimiento contracultural nacido en los años 60 en Estados Unidos, así como también a los seguidores de dicho movimiento. La palabra hippie deriva del inglés hipster que solía usarse para describir a la subcultura previa de los beatniks (no confundir con Generación Beat), que también tuvo como base importante a la ciudad estadounidense de San Francisco (California) y su distrito Haight-Ashbury. Esta nueva subcultura heredó algunos valores contraculturales de la Generación Beat y en menor grado del naturismo alemán, y en determinados casos crearon sus propias comunidades intencionales.
Escuchaban rock psicodélico y folk contestatario, abrazaban la revolución sexual y creían en el amor libre. Algunos participaron en activismo radical y en el uso de drogas como la marihuana, el LSD y otros alucinógenos con la intención de alcanzar estados alterados de conciencia, en realidad una forma de autorebelarse por la homogeneidad de conceptos que ofrece el Sistema. También buscaron formas de experiencia poco usuales, como la meditación. Debido a su rechazo al consumismo solían optar por la simplicidad voluntaria, ya sea por motivaciones hedonistas, espirituales-religiosas, artísticas, políticas, o ecologistas.
A finales de los años sesenta en EE. UU. los hippies constituyeron una corriente juvenil masificada, para después quedar pasada de moda (anticuada), pero las siguientes generaciones llamados neo-hippies mantendrían vivo al movimiento como una subcultura establecida en muchas formas y con nuevas generaciones hasta hoy. Así pues han emergido fenómenos como la Rainbow Family, la escena psytrance y goa trance o los deadheads y phishheads. En tanto pequeños enclaves de hippies originales y neo-hippies continúan desarrollando en parte este estilo de vida, aunque con algunas modificaciones, bien en la ciudad o en el campo.
Podrían considerarse algunos valores y consignas del movimiento en general, aunque existen hippies que enfatizan más sobre un estilo de vida bohemio; otros grupos con una tendencia marcada por la espiritualidad alternativa (new age, chamanismo); y finalmente otras comunidades que están envueltas en activismo radical (yippies), ecologismo, o varias de estas cosas al mismo tiempo.
En general se podría mencionar la tendencia de adoptar un modo de vida comunitario, basado en el amor, la paz. Renegaban del nacionalismo y de la regulación estatal así como de la mercantilización y burocratización de la vida cotidiana, como también del consumismo y del capitalismo. Esto se lo solía hacer mediante la participación en activismo radical y/o mediante la práctica de la simplicidad voluntaria. Existe cierta tendencia a revalorizar y valorizar modos espirituales no occidentales o no judeo-cristianos. Se suele estar en desacuerdo con los valores tradicionales de la clase media y de la burguesía así como los de la burocracia. Se considera el paternalismo gubernamental, el militarismo, las empresas multinacionales, y los valores sociales tradicionales como parte de un Sistema que, a sus ojos, guarda poca legitimidad o es esencialmente opresivo.
Sexo, amor y amor libre [editar]
La perspectiva del amor libre significa no necesitar de la aprobación de otros, del estado o de la iglesia y evitar la prohibición de éstos; de todo encuentro físico-sexual o romántico amoroso entre adultos en consenso mutuo. A veces se le asignó al sexo una importancia espiritual y de realización importante dentro la vida personal.5 Prácticas como la unión libre, la promiscuidad, el poliamor, la homosexualidad, la bisexualidad y las relaciones interraciales son aceptables tanto como el celibato y la monogamia.
Estados alterados de conciencia, drogas, meditación y recreación [editar]
Otro aspecto usualmente asociado a los hippies es la búsqueda de Estados alterados de conciencia. Aquí hubo muchas influencias puntuales y motivaciones. Se puede seguir una búsqueda espiritual o inclusive religiosa en el adentrarse a la experiencia psicodélica, así como la de lograr un estado de conciencia superior al que las formas y modos sociales contemporáneos tienden. Esta posición última fue la desarrollada por Aldous Huxley y continuada por iconos como Timothy Leary y Ken Kesey. El uso de sustancias psicodélicas es algo que diversas culturas pre-capitalistas practicaron y practican dentro de una perspectiva del chamanismo. Otras formas de lograr estos estados a los que otros hippies o los mismos que también han usado sustancias psicodélicas son las de la meditación con practicas como el yoga o practicas más recientes del new age con perspectivas ecologistas.
El uso de drogas puede ser así también algo recreativo y de interrelación social. Existe de todas formas una tendencia a criticar drogas duras como el alcohol, la cocaína, las anfetaminas y la heroína. Esto debido a que en ciertas oportunidades el alcohol puede ser causa motivadora de violencia. Así también drogas como la cocaína o la heroína suelen tener fuertes tendencias adictivas muy superiores a las de las sustancias psicodélicas (LSD) o la marihuana. Así también sustancias como la cocaína, las anfetaminas y la heroína tienden a ser asociables con la violencia del mundo del trafico de drogas y el negocio capitalista global del narcotráfico. El debate y las practicas dentro de los hippies es complejo y diverso. Generaciones posteriores de hippies han tendido en algunos casos a profundizar estas criticas a algunas drogas o a las situaciones de violencia y adicción ligadas a su consumo
Viajes y nomadismo
Otro rasgo asociable a los hippies es el gusto por viajar. Esto es uno de los puntos bastante asociables a la influencia de la Generación Beat, de donde la obra de Jack Kerouac On the Road (En el Camino) de 1957, representa toda una invitación literaria hacia el autodescubrimiento mediante el viaje y la aventura. Así pues es común empacar un equipaje liviano y marcharse hacia algún festival o concierto alternativo, una demostración política o en si cualquier otro lado solo para experimentar cosas nuevas y conocer a nueva gente. Es muy común el hacerlo a través de hacer dedo o como se le dice en otros lugares jalar dedo, pedir aventón, etc. En algunos casos la preocupación monetaria era nula o en todo caso menor que la del viajero habitual. Los hippies en esta forma anticiparon la tendencia posterior de los mochileros, despreocupándose del alojamiento al utilizar tiendas de campaña o bien yendo a casa de algún conocido o a un centro social, etc.

lunes, 22 de junio de 2009

Planchas



Los planchas son la tribu urbana más vernácula (a pesar de tener una fuerte influencia argentina, sobre todo a través de la cumbia villera), y a la vez la más temida y rechazada. Compuesta por miembros de los sectores más pobres de la sociedad, ser un plancha es, para la mayoría del resto de la población, sinónimo de ser un criminal o un marginal.

Algo de eso hay. En sus orígenes, "plancha" es un término carcelario: así llamaban los presos a las fotos de los prontuarios policiales. "Ser un plancha" significaba ser un criminal o un presidiario, o tener antecedentes. Hoy el plancha más típico tiene menos de 20 años, es común que use el pelo teñido de un rubio artificial y que se vista con prendas típicas de su tribu: camisetas de fútbol (los planchas del Cerro usan con orgullo la casaquilla de Cerro o de algún club extranjero, pero nunca jamás la de Rampla Juniors), pantalones amplios con muchos y grandes bolsillos, gorras con visera y zapatillas deportivas muy caras.

Lo que por lo general pasa desapercibido es que los planchas también son jóvenes que tratan de afirmar su identidad en el ambiente en que les tocó vivir. Tienen su propia música (la cumbia villera argentina y sus derivados nacionales), sus propios rituales (ir a bailes como el Interbailable) y su propio lenguaje.

Los planchas, tanto varones como mujeres (porque, aunque el imaginario colectivo casi no las registre, también hay mujeres plancha) desarrollan su propia cultura.

El lenguaje cotidiano de los planchas también está lleno de términos que les son propios. Algunos, como su propia denominación, son netamente carcelarios. Otros se remontan a un lunfardo de cinco o seis décadas atrás, y posiblemente también se deban a supervivencia carcelaria. Otros son muestras de ingenio, giros apropiados por la tribu o metáforas cotidianas.

En un liceo del oeste de Montevideo, un profesor le dio como tarea a sus alumnos la recopilación de un "diccionario plancha", tribu a la que algunos de ellos pertenecen. El resultado, que se ofrece a continuación, fue breve pero interesante. Se omite nombrar cuál es el liceo a pedido expreso de los estudiantes, que no quieren ser "estigmatizados".

Bagayo - Escondido, fugado.

Bote - Ómnibus.

Brazo gordo - El que exagera la pose.

Callate, rotweiller - No hables si no aguantás (las consecuencias).

Canalla - El que huye de los problemas o de la policía.

Come oreja - El que habla y habla hasta convencer.

Chamuyo - Gran mentiroso.

Cheta pisa barro - La que se hace la linda, pero vive en un cantegril.

Cheto come guiso - El que aparenta lo que no es.

Cheto raspa olla - El que aparenta un alto nivel, pero en realidad es un "muerto de hambre".

Chichi - Chica.

Chocar los pelos - Tener relaciones sexuales.

Choma - Chico.

Chorro - Ladrón que roba a los ricos, el que roba en el Centro o en barrios adinerados.

Embagayarse - Esconderse de la policía.

Es la pegada - Es lo correcto, es lo mejor.

Es un viaje - Queda lejos.

Estas re puchulo - El que se hace el lindo, pero en realidad es "refeo".

Guacho - Bobo.

Lancha - Coche Nissan de la policía.

"Los tiros no se ofrecen, se dan" - Respuesta que esgrime un verdadero plancha ante una amenaza.

No ladres - No hables de más.

No la mamés - No molestes.

No me prendas las tubas - No digas nada, no me quemes, no me delates.

No te hagas el bull dog - No amenaces.

Ortiba - Persona incapaz de hacer un favor.

Perro - Alcahuete.

Pelado - Modo en que los planchas se llaman entre ellos.

¿Qué pasa con la banda? - Saludo equivalente a "¿cómo andan mis amigos?".

Rati - Policía.

Rastrillo - Ladrón que roba en su barrio, "a los que no tienen qué comer". Opuesto a chorro, ser un rastrillo es uno de los peores pecados.

Rescatate - Ocupate de tus asuntos, "hacé la tuya".

Sacame la marroca que soy menor - Equivalente a: "no te hagas el malo conmigo, que soy menor".

Sos más pan... - Sos más bobo...

Ponerse la gorra - Reclamar, acusar, hacerse el policía.

¿Tenés una seda? - ¿Tenés una hojilla (para armar un porro)?

Toca reja - Alcahuete de la policía.

¿Una moneda pa’ la banda? - Modo de pedir un peso para el vino.

Vamos a agitar - Vamos a algún lado.

Vamos a hacer esa movida - Vamos a pedir plata para el vino.

Vieja - Al igual que "pelado", otro de los modos en que los planchas se llaman entre ellos.

Visa - Gorra con visera.

lunes, 1 de junio de 2009



Emo
El emo es un género musical derivado del post-hardcore nacido a finales de los años 80 y que se diferencia de éste por su sonido más lento y melódico. También está considerado una corriente del rock alternativo.
El término emo es un apócope de emotional hardcore o emo-core y hace referencia a las letras de los grupos del género, caracterizadas por abordar variadas emociones y estados de ánimo, buscando asimismo generar estas mismas emociones en el oyente. Para lograr una mayor expresividad utilizan en su música cambios de ritmo y crescendos, combinando en una misma canción estallidos de furia heredados del hardcore, con sonidos más apacibles.

Actitud de los grupos emo
Las bandas emo intentan no hacer música puramente comercial, ya que para ellos tratar de satisfacer a un público mayoritario con música "artificial" o "envasada", sería incompatible con expresar emociones genuinas. De hecho, tanto los conciertos de estos grupos como sus discos suelen tener precios bajos en comparación con los de otros artistas. Gran parte de los grupos de emo son contrarios a los artículos de merchandising musical, como camisetas u otros productos para ganar dinero.
Actualmente, el término emo se utiliza para identificar cierta actitud y ciertos patrones estéticos a menudo ajenos a la música emo-core y que no coinciden con el concepto original del término.
Historia
A lo largo de su historia, el emo ha pasado por varias etapas. A finales de los 80 el término emo se utilizaba para calificar a las bandas de post hardcore de Washington D.C. encabezadas por Fugazi. A mediados de los años 90, el género siguió los patrones sonoros creados por Sunny Day Real Estate. Hoy en día, algunas de las bandas más populares de este estilo son Dashboard Confessional, Thursday, Saves The Day, Amber Pacific, Silverstein y Jimmy Eat World.
Primera generación
En su origen, el término emo era usado para describir el sonido de los grupos de post hardcore de mediados de los años 1980 en la escena de Washington D.C. Fue definido como emo-core -abreviación de emotional hardcore- por la carga emocional de las letras de estas bandas y por la expresividad y espontaneidad que éstas exhibían en sus conciertos.
El primer disco considerado emo-core fue el álbum de debut homónimo de Rites of Spring en 1985. En él, el grupo redirigió la pasión y la rabia propias del hardcore hacia temas como la soledad o la añoranza del pasado en lugar de hacia la revolución social como había sido lo común hasta entonces en dicho género.
Otro grupo importante en esta época fueron Embrace, liderados por Ian Mackaye, ex integrante de Minor Threat, grupo que años antes ya había inspirado el movimiento Straight Edge.
En 1987 nació el grupo Fugazi, formado por los líderes de Rites of Spring y Embrace y cuya propuesta consistía en sumar al hardcore influencias de otros géneros como el post-punk o el por entonces incipiente rock alternativo. Fugazi se convirtieron en el grupo más influyente e innovador del post-hardcore y uno de los mayores referentes del emo.
Otros nombres importantes en este periodo incluyen los de Shudder to Think, 7 Seconds, One Last Wish, Beefeater, Grey Matter, Fire Party y posteriormente Moss Icon. La mayoría de estas bandas grabaron en el sello Dischord Records, propiedad de el líder de Fugazi Ian MacKaye, y muchas de ellas desaparecieron en los primeros años 90.
Segunda generación
A partir de mediados de los años 90 el emo comenzó a diferenciarse del post-hardcore, que por su parte evolucionó recibiendo influencias de sonidos más experimentales como el post rock y el math rock.
Uno de los grupos de Washington D.C. más destacados de la primera mitad de los 90 fue Jawbox, cuya visión del post-hardcore tuvo una gran influencia en los grupos emo posteriores. Su líder J. Robbins, más tarde en Burning Airlines, llegaría a ser el productor de muchos de ellos.
También otros grupos como Sense Field fueron poniendo los cimientos del emo, pero quienes determinaron el sonido definitivo del género fueron Sunny Day Real Estate con sus dos primeros discos Diary y Sunny Day Real Estate. El sonido de la banda de Seattle partía del post-hardcore para incorporar influencias del grunge y el indie rock, y se completaba con la apasionada y visceral forma de cantar de su líder, Jeremy Enigk.
El sonido patentado por SDRE, más melódico que el de los grupos de D.C., pronto creó escuela y decenas de bandas siguieron los mismos patrones de los de Seattle. Los grupos más importantes de este periodo fueron Mineral, Texas Is the Reason, Christie Front Drive, The Promise Ring o Braid. Esta escena sobrevivió hasta fines de los 90, cuando la mayoría de las bandas se separaron o cambiaron su estilo, bien en una dirección más mainstream o comercial, o bien hacia estilos de más difícil catalogación.


Jimmy Eat World en concierto


Taking Back Sunday en concierto
Tercera generación
A finales de los 90 la escena underground emo había desaparecido prácticamente y el término "emo" estaba todavía siendo aceptado en el mainstream, casi siempre ligado a las pocas bandas supervivientes de los 90, incluyendo a Jimmy Eat World.
Si bien Jimmy Eat World había tocado un estilo emo-core en los principios de su carrera, al tiempo del lanzamiento de su álbum Bleed American, la banda casi había eliminado completamente sus influencias emo tomando una dirección más cercana al mainstream. Cuando el público comenzó a conocer el término "emo" y supo que Jimmy Eat World estaban asociados con ella, la banda continuó siendo clasificada como tal. Por ende, los grupos más nuevos que sonaban como Jimmy Eat World y las bandas más melódicas de los tardíos 90 como The Get Up Kids, fueron rápidamente incluidas en ese género.
Desde entonces, el término "emo" cambió para describir una música completamente diferente a la de sus antepasados. Y, de una manera aún más genérica que en los 90, la palabra vino a designar una gran variedad de bandas, muchas de las cuales tenían muy poco en común, como es el caso de Taking Back Sunday, The Starting Line, Hawthorne Heights, Brand New, Something Corporate, A Static Lullaby, Thursday, Emery, Finch, Saves The Day y The Juliana Theory
El epicentro de la tercera generación cambió también. Mientras en los 90 sus principales orígenes habían sido California y Arizona, el nuevo movimiento ha cambiado de costa. La nueva meca del emo son las periferias que bordean la ciudad de Nueva York, Nueva Jersey y Long Island. La mayoría de las bandas actuales (y subsecuentemente, sus tempranas bases de fans) se originaron en esta región y progresaron hacia el exterior.
En muchos casos las bandas de "new emo" están tratando de dar su propia versión del emo, según sus propios términos. De cualquier forma, el éxito de unas pocas bandas aparentemente "menos emo" (las más populares en el mainstream), como Dashboard Confessional, trajo un incremento sustancial en el número de detractores del género.
Como resultado de los continuos cambios del emo a través de los años, un serio cisma ha surgido entre quienes prefieren uno u otro período concreto del género. Aquellos que siguieron al emo-core desde sus inicios son escépticos cuando aparece un nuevo grupo denominado "emo". Muchos, que reivindican la naturaleza independiente del emo de los 80 y 90, están disgustados por el "secuestro" de la palabra hecho por las empresas discográficas multinacionales para vender una nueva generación de música comercial

Flogger bailando Electro

Floggers


Flogger


Grupo de floggers en las afueras del Abasto Shopping.
Se conoce como Flogger a una moda adolescente originaria de Argentina, que está estrechamente relacionada con Fotolog.com, un sitio web donde se suben fotos y donde sus usuarios pueden comentar en ellas.
Se ha vuelto muy popular entre los jóvenes, para convertirse en casi un hábito o forma de vida.1 La palabra Flogger proviene de "flog", apócope de Fotolog. La popularidad de un fotolog se basa en la cantidad de firmas (comentarios) diarias a las fotos y sus amigos/favoritos. Los fotos subidas en sus respectivos fotologs suelen ser autorretratos.

Características
Vestimenta
El estilo se compone principalmente por pantalones chupines de colores llamativos (apretados jeans o joggings). Los floggers usan como zapatillas las deportivas de lona o las Converse, el peinado que los distingue es semi-largo en los varones, y un flequillo en ambos géneros el cual tapa parcialmente, o por completo, los ojos. Se conoce como floggers a los jóvenes seguidores y amantes de esta moda. Algunas características de los floggers es su gusto por la moda y por marcas reconocidas.
También son conocidos por utilizar tiradores y chupines con cintura alta, que es lo último en moda de los floggers ya que utilizan la misma ropa que se usaba en otras épocas.
Su estética estereotipada les hizo ganar enemigos desde varias tribus urbanas y subculturas, las cuales consideraron que les habían robado elementos de sus propias estéticas. Por ejemplo, los emos argentinos consideran que los floggers les robaron el peinado, los rolingas creen que los floggers les robaron el uso del característico pañuelo deshilachado atado al cuello, y los punks están peleados con los floggers porque (además de toda la parte ideológica) creen que estos les robaron el uso de los apretados pantalones chupines y zapatillas Converse a los Ramones, la legendaria banda estadounidense de punk rock, que en especial en Argentina causó sensación tras sus visitas contínuas al país entre 1987 y 1996.
Música
Entre los gustos de estos adolescentes, se encuentra la música electrónica, principalmente techno, sobre la cual han desarrollado una peculiar manera de bailarla llamada Electro. Los movimientos, consisten en extender rápidamente una pierna, golpeando el suelo con el talón, y señalando la otra pierna hacia atrás y, a continuación, cambiar rápidamente la posición de las piernas, y muchas variaciones más.
Esto no impide que hayan floggers que les agraden otros estilos musicales, como el pop, el reggaetón o la cumbia, en especial si los floggers provienen de otras tribus urbanas a las cuales pertenecieron con anterioridad.
Ideología
Criticas
El hecho de ser o considerarse un flogger ha sido criticado desde algunos sectores sociales haciendo hincapié en la sobreexposición de los adolescentes, señalando la particularidad de la publicación de fotos sugerentes, o en algunos casos escasas de ropa, ya que Fotolog.com no presenta un filtro para su protección, ni requiere una edad mínima para su registro.2 Sin embargo, si bien existe la posibilidad de publicar ese material, es poco frecuente, ya que tales fotos son borradas por parte de los administradores del sitio y suelen causar el cierre del flog.
El fenómeno también es criticado por poder resultar tendiente a la frivolidad y superficialidad.3 Los floggers suelen ser catalogados como estereotipados y seguir un patrón común de conducta y estilo, por lo cual suelen ser motivo de burla o rechazo por parte de otras subculturas de jóvenes, principalmente desde los «cumbieros».4 5 Otras tribus que los criticaron por su relación con la moda, lo referente a lo comercial, y la falta de una ideología política y social, fueron los rolingas, los punks y los metaleros. Los floggers son una tribu originada en sectores socioeconómicos adinerados, por eso las personas que rechazan la tribu los llaman también "chetos" (término referido a un joven adinerado y frívolo, equivalente a los términos "fresa" en México y "pijo" en España). Hay casos donde un joven que pertenecía a una tribu urbana, la dejó para unirse a la de los floggers (tema del que trata la canción "Los floggers" de la banda de cumbia villera El perro), lo cual es visto comúnmente como una traición o como una forma de corromper la integridad, la moral o los valores de uno a cambio de simpatía en otros grupos humanos, fama, aceptación en otra tribu, o cualquier otro tipo de beneficio personal en desdén de las amistades anteriores ("venderse"). Esto queda evidenciado por las críticas que recibieron durante las entrevistas hechas a los floggers, donde el tema del consumismo relativo a los floggers era el eje de la nota.

Rolling Stones- Satisfaction (live)

Rollinga



Rolinga



Dos "rolingas", fans de las bandas Viejas Locas y La 25.
Rolinga es el nombre dado a una moda urbana de la Argentina, cuya popularidad estalló en 1995. También se denomina de esta forma a los seguidores de esta. Un sinónimo de esta tribu es la palabra "stone". Se caracterizan por su estética; basada, entre otras influencias, en la de Mick Jagger en la década de los '60. También se caracteriza por el gusto de sus seguidores por el rock rolinga, y por el tipo de comportamientos que estos tienen, propias de la "cultura barrial".
Historia [editar]
Origen [editar]


Luca Prodan, cantante de Sumo, banda que influenció al rock rolinga.
Los orígenes de la tribu son sórdidos, no se sabe en qué momento exacto se originó la tribu, supuestamente a fines de los años '80, cuando los Ratones Paranoicos dejaron el punk rock y se volcaron al rock and roll, coincidiendo con el nacimientos de bandas como Los Piojos y Viejas Locas.
Se saben las influencias generales de la tribu: la estética de Mick Jagger en los años '60, la música de los Rolling Stones en sus inicios, la apología de la "vida barrial" propia del heavy metal desde los años '70, y los comportamientos del público de bandas "under" como Patricio Rey y los redonditos de ricota y Sumo.
También contribuyeron el mal pasar económico, cultural e institucional de la Argentina durante la presidencia de Carlos Saul Menem; y el fenómeno de las barra bravas en Argentina.
Apogeo [editar]


Pocas subculturas atrajeron no solamente a jóvenes sino también a adultos. El fenómeno "rolinga" lo hizo. Aquí un padre y un hijo "rolingas".
En 1995 los Rolling Stones dieron una serie de shows en Argentina, como parte de su "Voodoo Lounge Tour". Habían elegido a los Ratones Paranoicos y a Viejas Locas como "teloneros". Entonces, se desató el fenómeno en la Argentina.
Los seguidores de esta tribu, pertenecientes a los sectores más marginales de Buenos Aires y del Conurbano bonaerense (en especial su zona oeste), crecieron en número y su presencia se hizo notoria en lugares como parques públicos, estadios de fútbol, recitales, etc. donde su número sobrepasaba claramente al de los pertenecientes a otras tribus, al ser un fenómeno masivo.
La tribu de los rolingas se volvió una moda en la Argentina, que predominó en Argentina hasta diciembre de 2001. Las claves eran su estética simple, la identificación (similar a la correspondiente a un equipo de fútbol), y la simpleza musical. Además que evidenció el predominio de la "cultura barrial" en los espacios artísticos de la Argentina, al haber popularizado, junto a su explosión, otras corrientes de similar origen marginal.
Incluso, llegaron a crearse subtribus dentro de los mismos rolingas, como los "paranoicos" (fanáticos de los Ratones Paranoicos) y los "ricoteros" (fanáticos de Patricio Rey y los redonditos de ricota), los cuales irónicamente están peleados entre sí.[1]
Actualidad: decadencia [editar]


Grupo de "rolingas" fuera de un show de los Rolling Stones en Argentina, en febrero de 2006. El efecto "Cromañón", consecuencia del incendio en 2004 del local bailable que llevaba ese nombre, dañó la imagen pública de los "rolingas".


El "santuario" en la vereda del local bailable República Cromañón.


Graffiti con motivo de un aniversario del incendio de República Cromañón.
A partir de diciembre de 2001, con el apogeo de la cumbia villera y el nacimiento de la tribu de los cumbieros, la tribu de los rolingas comenzó a perder peso.
La cumbia villera también había causado sensación en el público más marginal y carente de recursos, por eso había desplazado a los rolingas en los sectores de clase baja, aunque en los sectores rolingas de clase media, y en la zona oeste del conurbano bonaerense, donde el fenómeno rolinga estaba más arraigado, permaneció predominante.
Sumado a esto, la desaparición de bandas como Viejas Locas y Jóvenes Pordioseros y el cambio de música en otras bandas rolingas contribuyó a la decadencia.
Pero el factor que se considera universalmente que definió el camino descendente de esta moda fue el incendio del local bailable República Cromañón, donde se vieron implicados, entre otros, los integrantes de la banda de Rock rolinga Callejeros. Además que el incendio por sí sólo hubiese golpeado a la tribu, las nuevas medidas de seguridad y prevención adoptadas por los gobiernos para los pequeños locales donde las bandas rolingas pudiesen tocar debilitaron también el seguimiento del público, que fue perdiendo entusiasmo.
Por otro lado, los medios, musicalmente hablando, comenzaron a prestarle atención a la música indie, al rock alternativo, y al pop rock, dejando al rock rolinga en un segundo plano, marginándolo. Y mediáticamente, acapararon la atención nuevas tribus urbanas que tomaron lugar en la Argentina en los años 2000, en especial los cumbieros, floggers y emos.
La tribu de los rolingas había aparecido como una moda. A diferencia de otras tribus, como los punks, no estaba erigida sobre una ideología política o de compromiso social, por lo que su duración estaba condicionada, cuanto mucho, a la del gusto por una moda, en los casos más superficiales.
La decadencia del género y cómo sobrevive actualmente está explicada por Toti Iglesias, actual líder de Hijos del Oeste:
"En su momento fuimos pintorescos para los medios, y cansamos con eso de ver quién estaba más pirado. Por un montón de factores, las bandas de rocanrol no tienen lugar y parece que se hubieran ido, pero siguen dando vueltas: no se ven, pero están ahí."
[2]
La moda y su música sobrevivió mezclándose con otros estilos marginales, como los rastas (llamados "rastones" tanto a sus seguidores como al estilo musical) y los cumbieros (en este caso, "cumbiastones").
A pesar de estar fuertemente debilitada en la actualidad, la tribu sobrevive y es en la zona oeste del conurbano bonaerense, donde desde siempre estuvo más arraigada, donde alcanza su predominio.
Características [editar]
Música [editar]
Los rolingas son fanáticos del estilo de música que ellos crearon, el rock rolinga, el cual ellos llaman simplemente "rocanrol".
Son fervientes seguidores de bandas como Callejeros, Ratones Paranoicos, Intoxicados, Los Piojos, Hijos del Oeste y El Bordo; además de una gran cantidad de bandas rolingas que tocan en el circuito "underground", como Los Gardelitos, El Bordo, La Mocosa, Barrios Bajos, La Covacha, La 25, creatura etc.
Sin embargo, los rolingas también pueden ser fans de bandas que no son de rock rolinga, como La Renga, Patricio Rey y los redonditos de ricota, Las Pelotas y Bersuit Vergarabat. Incluso, han llegado a haber rolingas en bandas que no se asemejan en lo absoluto al rock rolinga, como Catupecu Machu.[3]
Los rolingas en general subestiman o desprecian otros géneros musicales, limitándose a escuchar solamente el rock rolinga. Los que lo hacen, lo hacen porque creen que los otros estilos son parte del "establishment" (incluso con géneros que son comercialmente menores, como el punk rock y la música experimental), aunque otra causa es porque hay quienes son cerrados musicalmente y no quieren escuchar otra cosa que no sea el rock rolinga. Por este motivo la tribu ha tenido conflictos con los punks, y ha incluso tenido desacuerdos entre sí, como cuando Intoxicados, al tocar distintos estilos musicales, hizo dividir a su público en un grupo de rolingas conservadores y otro autodenominado como "la nueva religión".
Como queda dicho, su música se mezcló con el reggae y el blues, formando otros subgéneros.
Vestimenta [editar]
Una de las características de los rolingas es su estética estereotipada. No obstante, en los últimos años la cultura rasta y cumbiera influyó en ella.
Sus fans suelen utilizar el flequillo de Mick Jagger en los años '60 (algunos utilizan rastas), usan zapatillas gastadas (en general Topper), un pañuelo deshilachado en el cuello, una remera de alguna banda del movimiento o con la lengua de los Rolling Stones y en algunos casos, collares en el cuello y pulseras en las muñecas; tambien suelen utilizar camperas y pantalones de jogging, aunque también utilizan pantalones jamaiquinos o de jean, en cualquier caso, pueden estar rotos.
Las mujeres se visten de la misma forma, aunque también suelen utilizar en sus orejas aros gitanos comprados en ferias artesanales, y faldas largas, de estilo gitano.
Llevan consigo mochilas con motivos de sus bandas preferidas, con escrituras hechas con corrector líquido.
Comportamiento [editar]
La "cultura barrial" es un elemento que los rolingas también adoptaron. Poseen un sentido de pertenencia fanático por su barrio, su grupo de amigos, la escuela a donde van, la banda a la que siguen y su equipo de fútbol. Este fanatismo ha sido denominado por ciertos medios como "futbolización".
Los rolingas suelen reunirse en grupos de amigos que son de su tribu. En las esquinas acostumbran a tomar cerveza y consumir drogas junto a ellos.
Cuentan con una serie de "ritos", relacionados directamente con el fútbol: el uso de banderas con inscripciones relacionadas con su banda (llamadas "trapos"), cánticos de fútbol con letras hablando del fanatismo por su banda (cuya música es sacada de otra canción, que puede ser de cualquier género, e incluso de una en inglés, como "Karma chameleon" de Culture Club) o de desprecio por una banda que les disgusta (similar a las que cantan las hinchadas del fútbol contra sus equipos rivales), y se encienden elementos pirotécnicos como las bengalas (lo que produjo en el 2004 la tragedia del boliche República Cromañón).
Los rolingas acostumbran profesar un fanatismo por sus bandas preferidas similar al que sienten por sus equipos de fútbol. Y a las bandas que odian, en general de otros estilos musicales, las tratan de una forma similar a la de una hinchada de un equipo de fútbol rival.
Las bebidas que acostumbran consumir son la cerveza y el vino tinto, este último tomado en cajas de cartón llamadas "tetra" en el lunfardo. Pueden llegar a consumir marihuana u otro tipo de drogas duras, cosa que forma parte de la tribu y que es expresado en las letras de las canciones de rock rolinga.
Los rolingas escriben graffittis en las paredes (comportamiento ausente en otras tribus, como los cumbieros).
Ambientes y lugares [editar]
Los rolingas están fuertemente arraigados a la zona oeste del conurbano bonaerense. Los barrios de Buenos Aires donde su presencia es más notoria son Liniers, Mataderos, Villa Lugano y Piedrabuena, aunque en los últimos años la tribu de los cumbieros se volvió predominante en estos lugares.
Por lo tanto, viven en barrios de clase baja y media baja.
En sus momentos de recreación, van hacia parques públicos, estadios de fútbol, pequeños clubes, bares y pubs, y ferias artesanales o comerciales.
Conflicto con otras tribus [editar]


Los Ramones habían tocado en la Argentina por primera vez en 1987, y tras su paso el punk se había convertido en uno de los géneros más populares en la Argentina. Por eso los punks más fanáticos recibieron con hostilidad la llegada de los Rolling Stones en 1995 y el siguiente estallido del fenómeno de los "rolingas".
La tribu, al haberse vuelto una moda, pronto comenzó a tener conflictos con otras tribus, que la odiaban. En particular, la tribu con la que más problemas tuvieron los rolingas desde el principio fue con los punks.
A diferencia de otras rivalidades donde los grupos enfrentados eran uno marginal contra otro adinerado (como sí ocurre entre cumbieros y floggers), la rivalidad en este caso era similar a la de dos barra bravas enemigas, ya que ambas tribus tenían un origen marginal y poseían hábitos y costumbres relacionadas con las hinchadas del fútbol. Sumado a esto, ambas frecuentaban la escena "under" del Rock de Argentina y su rivalidad tenía características territoriales: los rolingas frecuentaban la zona oeste del conurbano bonaerense mientras que los punks frecuentaban la zona sur de dicha aglomeración.
Los punks acostumbran a contestar la presencia de rolingas con cánticos similares a los de las hinchadas de fútbol, como "¡El que no salta es un stone!" o "¡Che vos Rolling Stones, te ganaste tu cajón!/¡Che vos Rolling Stones, te ganaste tu cajón!/¡Tu cuerpo se está pudriendo/las larvas te están comiendo!/¡gritá, gritá, gritá/que te van a escuchar!/¡gritá, gritá, gritá/que te van a sacar!" (extraído de la letra de la canción "Q.E.P.D." de 2 Minutos, banda punk de Argentina) o "¡Ricky no se murió!/¡Ricky no se murió!/¡que se muera Mick Jagger/la puta madre que lo parió!", este último tiene una variante nombrando en lugar de Ricky a otro ídolo del punk rock: Joey Ramone en cuyo caso cantan "¡Joey no se murió!/¡Joey no se murió!/¡que se muera Mick Jagger/la puta madre que lo parió!".
Juan Diego Incardona, escritor argentino y excompañero en la escuela secundaria de Pity Álvarez (actual líder de Intoxicados), dio un indicio de cómo eran los enfrentamientos entre ambas tribus: